El estrés y la ansiedad se tratan con cannabidiol

Los productos de CBD de venta libre se recetan en los mercados de suplementos dietéticos y bienestar. Una de las características más citadas del CBD es su capacidad para reducir el estrés y la ansiedad. Una encuesta exhaustiva entre consumidores de medicamentos con CBD realizada por científicos europeos en 2018 mostró que las tres principales enfermedades para las que se utiliza el cannabidiol eran:

• Alivio de los síntomas del dolor;
• Ansiedad/Estrés;
• Depresión.

Un estudio realizado a finales de 2021 mostró que las principales razones para utilizar CBD sin receta eran:

• alivio del estrés;
• combatir la ansiedad;
• sueño mejorado.

Un análisis de 2020-21 del contenido de las redes sociales en Europa, Canadá y EE. UU. encontró que el CBD es más discutido como una opción terapéutica para tratar los trastornos de ansiedad y el dolor crónico. Sin embargo, existen problemas asociados con la baja calidad del aceite de CBD de fabricantes desconocidos, la posible presencia de sustancias controladas y la dificultad de obtener dosis altas para el tratamiento de afecciones graves de ansiedad.

Junto al uso confirmado del CBD para el estrés y la ansiedad en personas que se automedican, existe un número creciente de estudios clínicos que demuestran los efectos ansiolíticos del cannabidiol en diversas psicopatologías. Varios ensayos clínicos aleatorios han confirmado la capacidad del CBD para detener los ataques de pánico y aliviar la ansiedad, tanto en voluntarios sanos como en pacientes con diversos diagnósticos.

Cabe señalar que la base de evidencia en esta área crece casi a diario.

Detalles de la investigación y dosis de CBD para el manejo del estrés

En voluntarios sanos, en estudios controlados, dosis de 300 o 600 mg de cannabidiol tomadas por vía oral redujeron la ansiedad al hablar en público y redujeron la presión arterial y la respuesta cardiovascular al estrés físico y mental (600 mg). Estos efectos ansiolíticos del uso de CBD están asociados con cambios en la actividad cerebral en las regiones corticolímbicas del cerebro, que controlan la regulación cognitiva y emocional. En voluntarios sanos, 7 días de tratamiento con CBD (600 mg/día) también redujeron la respuesta hemodinámica al estrés físico agudo.

En pacientes con trastorno de ansiedad social generalizada que no habían recibido tratamiento previo, dosis orales de 300 o 600 mg redujeron la ansiedad y aumentaron la tolerancia al estrés. De manera similar, en adolescentes con trastorno de ansiedad social, las puntuaciones de ansiedad y miedo a una evaluación negativa se redujeron después de 4 semanas de uso de CBD (300 mg/día). Al igual que en voluntarios sanos, los efectos ansiolíticos del CBD en los trastornos de ansiedad también están asociados con cambios en la actividad corticolímbica. Además, en participantes no tratados con riesgo clínicamente alto de psicosis, el CBD (600 mg) normalizó parcialmente los cambios en la función límbica, estriatal y del mesencéfalo en un ECA. Un estudio posterior realizado por el mismo grupo encontró que 7 días de tratamiento con CBD (600 mg/día) en pacientes con alto riesgo clínico de psicosis restablecieron parcialmente la respuesta de cortisol detectada durante la prueba de estrés social de Trier al nivel observado en el grupo de control. En este estudio, la ansiedad en respuesta a una prueba de estrés fue mayor en pacientes de alto riesgo y menor en controles sanos, observándose una respuesta intermedia en pacientes de alto riesgo tratados con CBD durante 7 días.

La ansiedad suele combinarse con otras manifestaciones de estrés. Se han probado los efectos ansiolíticos del CBD en otras patologías. En adultos con ansiedad o falta de sueño, el tratamiento con CBD (25 a 175 mg por día) redujo la ansiedad y mejoró el sueño en el 84% de los participantes del estudio. Los pacientes con dolor no relacionado con el cáncer y síntomas de salud mental lograron reducciones significativas en los síntomas de dolor, depresión y ansiedad previamente informados.

Mecanismo de acción del CBD para la ansiedad

Muchos estudios preclínicos han examinado los efectos ansiolíticos y mnemotécnicos del CBD en modelos animales de ansiedad y miedo aprendido cuando el CBD se administra sistémicamente o directamente al cerebro, revelando posibles mecanismos de acción del cannabidiol en estos modelos. Los efectos del CBD sobre la formación de recuerdos de miedo también dependieron de su capacidad para suprimir la actividad de las neuronas de dopamina directamente en la corteza ventral, un efecto que también se cree que es la base de las supuestas propiedades antipsicóticas del CBD.

Por lo tanto, la capacidad terapéutica del CBD para controlar la ansiedad y el estrés no depende de un único objetivo molecular e implica múltiples procesos biológicos. Esto también puede explicar por qué el CBD tiene efectos ansiolíticos en muchos tipos diferentes de trastornos de ansiedad. En consecuencia, existe una sólida base de evidencia sobre el pronunciado efecto positivo del cannabidiol en el tratamiento del estrés y el alivio de los trastornos de ansiedad.